lunes, 4 de noviembre de 2019

Evitemos


¿Qué será mejor aprender por vivencias propias o por la experiencia ajena?Seguramente los entendidos en materias de educación se inclinarían por responder la anterior pregunta esgrimiendo el conocido refrán: nadie aprende por cabeza ajena. Desde Seneca se encuentran frases que alientan la formación basada en las propias experiencias. Son tantas las referencias encontradas enfatizando la importancia del aprendizaje adquirido con base en vivencias propias que no parece lógico presentar una tesis contraria. Esto es especialmente cierto en áreas de aprendizaje motriz, donde no hay manera de superar al refrán de marras. Nadie puede montar una bicicleta, confeccionar un traje, realizar un procedimiento quirúrgico o cualquier acto motriz sin dedicar el tiempo necesario para desarrollar una correcta curva de aprendizaje. Los mejores resultados se esperan de aquellos que acumulan la mayor experiencia, en eso estamos todos de acuerdo. Sin embargo, obtener un aprendizaje correcto por vía de la experiencia que otro pueda acumular no es aplicable en áreas diferentes a las motrices. En los aspectos relacionados con el desarrollo personal o social, evitar los conceptos fracasados y replicar las ideas exitosas, experimentadas por otros, puede ser la mejor forma de lograr un adecuado y rápido crecimiento individual o colectivo. La situación actual del país y de nuestros países vecinos se presenta propicia para aplicar el refrán del aprendizaje en cuero ajeno. Hace pocos días, los medios informativos nos hicieron testigos de toda la violencia producida por comunidades hastiadas de medidas gubernamentales que afectan el desarrollo de los pueblos y usualmente favorecen el crecimiento de algunos privilegiados. Chilenos, ecuatorianos y catalanes quemaron el metro, saquearon almacenes, asaltaron oficinas publicas y otros actos de violencia inesperados en estos pueblos de amplia tradición pacifista.
Entonces, echando mano de otro conocido refrán que dice: si por aquí llueve por allá no escampa, Me pregunto ¿qué puede ocurrir aquí en Colombia con el paro nacional convocado para el 21 de noviembre? Se contagiarán los más de 40 sindicatos y 100 representantes de movimientos sociales de ese virus que convierte la protesta valida y entendible en un vandalismo reprochable e innecesario. Presidente Duque y estado colombiano la situación tiene precedentes similares pero actores con mayor experiencia en temas de violencia. Aprendan de la experiencia ajena vivida en los países mencionados y evitemos ese paro, evitemos el conflicto, todavía estamos a tiempo.





No hay comentarios.:

Publicar un comentario